... cosmopolita ambiente de la Ciudad rebosante de actividad, volver a ver sus calles repletas sus amplias avenidas sus rincones castizos sus hermosos paseos en resumen su vida lógicamente cambiada con el paso de los años.
Nos dispusimos a disfrutar de todo ello con ilusión visitando los rincones típicos de la Plaza Mayor y sus alrededores, la calle Mayor mercado de San Miguel, Cava Baja, Puerta del Sol , Palacio Real con sus bonitas puestas de sol, Templo de Debod etc…
Ya en el Barrio de Salamanca, zona mas tranquila, invitaba a un paseo mas sosegado por sus lujosas y elegantes tiendas de la calle Serrano.
Una tarde soleada para disfrutar del Parque del Retiro de sus espléndidos paseos, agradable quietud en medio del barullo de la Ciudad, tomar el sol, leer, pasear, hacer deporte, un remanso de paz apenas se oye el murmullo de la Ciudad.
El domingo visita al Rastro la calle Curtidores llena a rebosar tiendas y tenderetes de mil ajuares pregonando a gritos sus productos, revolver y revolver buscar el artículo deseado, a cual mas dispar, barato todo barato, los clientes de tienda en tienda, aquí abanicos allí muñecas allá ropa calzado baratijas antigüedades etc… montones todo a montones , un espectáculo!.
Otra afición arraigada en Madrid es la de salir a tomar algo, a cualquier hora en cualquier lugar un sinfín de bares tabernas, charcuterías , mercados como el de San Miguel o el de San Antón repletos de tapas de bocadillos de calamares a cual mas apetitoso que te ofrecen atentos camareros siempre acompañado por una gran variedad de bebidas, chocolate con churros amenizan largas tertulias por la mañana , tarde o por la noche da igual, ya a altas horas un buen gin-tonic termina de entonar el cuerpo.
Las Artes, también había de cultivar las artes, visita a La Almudena, San Isidro, Los Jerónimos, Palacio Real, Museo del Prado, Museo Thyssen, Caixaforum o el Museo Reina Sofía admirar sus espléndidas colecciones, exposiciones temporales, obras clásicas, modernas, contemporáneas, Velázquez, El Greco, Murillo, Sorolla, Picasso, Miró, y muchos mas… diversidad de épocas y estilos, al salir del Prado una ligera lluvia refresca la noche madrileña.
Llega la hora del espectáculo, habíamos elegido un musical como fin de fiesta, la Gran Vía y Callao eran un hervidero el Lope de Vega lleno, el público entusiasmado, olor a palomitas, aplausos muchos aplausos.
Días muy intensos, ajetreo, de ir y venir, de paseos metros y autobuses, de cumplir la agenda prevista de vivirlo todo y en medio un “paréntesis” un esperado encuentro breve pero entrañable una agradable tertulia, reposada muy intensa con nuestros buenos amigos de Madrid. ¡GRACIAS AMIGOS!
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