Gatos Callejeros

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Los gatos siempre resultan muy fotogénicos, bien por su pelaje, su color o esa expresión tan llamativa y candorosa que adoptan muchas veces, ayudados por sus grandes ojos rasgados y sus bigotitos tan finos y estirados. Suelen ser fáciles de fotografiar cuando están en casa, confiados, cómodos y confortables, pero fotografiar gatos callejeros ya es más difícil.

Un fin de semana del mes de julio, cuando llegamos a la casa de El Brosquil (Valencia), nos encontramos con unos pocos gatitos casi recién nacidos merodeando por el jardín y sus alrededores. La primera vez que nos vieron, huyeron a toda prisa desapareciendo de nuestra vista, pero a la mañana siguiente estaban otra vez allí, curioseando con precaución. Les sacamos un plato con leche fresca y aunque su primera reacción fue una tímida y rápida retirada, a lo largo de la mañana se fueron animando hasta que por fin se atrevieron a beberse la leche.

De esa forma, conseguimos ganarnos su confianza y pude acercarme lo suficiente para tomar las fotos.